En venganza, saqué dos pastillitas del frasco y se las puse al Zacarías en el café con leche de esta mañana. ¡Ñácate! Y después me fui todo el santo día a comprar el resto de los regalos al Carrefour. El esquenún me llamó catorce veces al telefonito, para que volviera pronto, pero yo me hacía la distraida para que escarmiente. Volví a la nochechita, y me lo encontré al pánfilo en calzoncillos, a punto de acorralar a la chinita contra el aparador. "¡Zacarías! ¡Dejá a esa china que es de tu padre!", le dije justo cuando le estaba arrancando la bombacha.
Ni bien me vio, dejó a la china media estúpida en el suelo y me empezó a correr por todo el patio. "¡Mirta, volviste!", me gritaba con la boca llena de baba. Me dejé alcanzar atrás de un ligustro, porque justo ahí no nos ve nadie y trascartón está acolchadito. ¡Ay dios santo! Desde el ochentaiocho, que Racing ganó la Supercopa, que el Zacarías no estaba tan trabajador con una. Así que no le dije que era mi cumpleaños... Total, el regalito ya estaba hecho..."
Si visitamos este blog, podremos leer páginas del diario de una ama de casa argentina tan desternillantes como la que me he permitido copiar. La mala noticia: es un blog que se dejó de actualizar en el 2005, desde que Mirta Bertotti fue abuela. La buena: 200 páginas disponibles para engancharse a ellas.
3 comentarios:
Your blog keeps getting better and better! Your older articles are not as good as newer ones you have a lot more creativity and originality now keep it up!
Hola!!! en realidad Mirta es Hernan Casciari, un escritor de cuentos de Mercedes, buenos aires, Argentina. Hay mucho contenido de el en la red.
No seas boludo, no seas buchón.
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